La presentan como laberinto cuando realmente es un camino disuasorio, es un barrido de toda la superficie hasta llegar al centro. Un aliciente más del interesantísimo Palazzo Ducal de los Gonzaga en Mantua, una de las grandes atracciones del turismo italiano.
Se visita Mantua para admira los frescos del Mantenga y una vez allí no parará de sorprendernos todo su conjunto. Solo lamentamos que Isabella d´Este no fuera un poco mas ilustrada y su studiolo albergará menos virtudes teológicas y algo más de ciencia liberal.
El laberinto tiene la simetría para alargar el camino de entrada y salida. Simetría geométrica que solo se rompe para el acceso y la salida. No es la curva de Peano para cubrir el plano pero tiene encanto.
Turismo matemático 