El Museo Nacional del Azulejo de Lisboa no ha olvidado que el arte de la azulejería sigue vivo en Portugal. El modernismo y el racionalismo también impulsaron la decoración con cerámica vitrificada.
Llamamos la atención sobre un panel de los años 20 que representa un corte plano de un cubo 7x7x7 de inquietante modernidad: nomenclatura de las hojas de cálculo sesenta años antes del DBaseIV o el Excel. Los tensores acababan de mostrar en la Teoría General de la Relatividad que eran una herramienta fundamental.
Como muestra de la deuda de la perspectiva con el azulejo mostramos otro panel que nos sumerge en la tridimensionalidad del espacio de una forma simple.